Se sugiere que, cuando adoptes a tu conejo por primera vez, le des un poco de agua o algo que le guste en una jeringuilla oral (sin aguja). Así se acostumbrarán a la alimentación asistida para que no sea algo horrible y nuevo cuando necesiten medicación.
Si tu conejo deja de comer, tu veterinario puede sugerirte que lo alimentes «manualmente» o con una «jeringuilla» como parte de un plan de tratamiento. Esto sólo significa que preparas algún tipo de mezcla alimenticia y se la das a tu conejo a través de una gran jeringuilla. Tu veterinario puede proporcionarte un suplemento alimenticio herbívoro en polvo, como Critical Care, que se reconstituirá en agua caliente, o darte una receta para hacer una papilla casera de pellets. Tu conejo puede estar muy tranquilo con este procedimiento en la consulta del veterinario. Lo más probable es que se enfaden mucho cuando lo intentes en casa. Por regla general, un conejo que se resiste a ser alimentado con jeringuilla probablemente no esté tan enfermo como para necesitarlo.
La alimentación con jeringuilla es realmente un arte y una ciencia, y se necesita práctica, paciencia y creatividad para averiguar cómo hacerlo. Sin embargo, juramos que puede hacerse y que hacerlo puede marcar la diferencia entre la vida y la muerte. HRS nunca recomienda empezar a alimentar con jeringuilla a ningún conejo que no coma sin un examen físico del veterinario, posiblemente radiografías, y asegurarse de que es el momento adecuado.